GESTIÓN CURRICULAR (2)

UNA APROXIMACIÓN A LA (DE) CONSTRUCIÓN DEL CURRÍCULO.

En publicaciones anteriores, he compartido definiciones sobre organización escolar, gestión institucional, gobierno escolar y gestión curricular. Pero para dar una vuelta de tuerca más sobre este último tema, resulta oportuno profundizar algunos aspectos vinculados con la construcción de un currículo.

El contexto en el que los docentes ejercen sus prácticas debe interpretarse como parte de procesos políticos, económicos y sociales que son dinámicos, complejos y sujetos a cambio. Por lo tanto, los conocimientos y métodos de enseñanza evolucionan con el tiempo, no pueden permanecer estáticos y, por lo contrario, es muy sano revisar periódicamente el currículo y acordar ajustes.

El diseño curricular implica la construcción de un plan de estudios ya sea para una materia específica o para el sistema educativo en general. Este proceso incluye identificar los objetivos de aprendizaje y desarrollar una secuencia estructurada de recursos para lograr esos fines. Si bien la estructura y el contenido son aspectos cruciales de un currículo, su diseño también está influenciado por diferentes factores: el nivel de desarrollo de los estudiantes, el contenido específico de la disciplina, el tiempo asignado para la enseñanza y los recursos que se tienen a disposición. Estas dos últimas suelen ser decisiones políticas jurisdiccional de las cuales la comunidad educativa no siempre tiene voz.

Los docentes de hoy no son sujetos pasivos frente a los diseños curriculares que procuran moldear sus prácticas. La concepción de prácticas de enseñanza constituye un marco teórico fecundo para interpretar los discursos de los docentes cuando hacen referencia a qué y cómo enseñan determinados campos del conocimiento, y merecen ser escuchados por aquellos "especialistas" que quizás, hace mucho tiempo no pisan las baldosas flojas de un aula de escuela de barrio.

A criterio de Gvirtz y Palamidessi (1998) “la construcción del currículum abarca el conjunto de procesos que intervienen en la definición de qué y del cómo se enseña y aprende en las escuelas.

Para Basil Bernstein, una autoridad en la materia, aquello que debe ser enseñado en las escuelas no implica recortar contenidos arbitrariamente, sino que es un nuevo producto cultural. Bernstein especifica que ese recorte implica una reconstrucción que conlleva determinados fines morales, políticos e ideológicos de la coyuntura en la cual se vive. 

De esta manera, el contenido a enseñar encuentra su concreción en la interpretación que realiza el docente en el momento de planificar su clase y de presentarla ante sus estudiantes dentro de un contexto institucional. 

Por lo tanto, los lineamientos curriculares que elaboran las jurisdicciones constituyen uno de los momentos del proceso de construcción curricular, por lo que, las instituciones escolares y los docentes quedarán sujetos a procesos de apropiación diferencial inteligibles. http://www.bnm.me.gov.ar/giga1/documentos/EL006491.pdf

COMPONENTES DE UN DISEÑO CURRICULAR.

En mis años de docente, tuve oportunidad de participar y colaborar en la construcción y ajustes del diseño curricular del sistema secundario de la jurisdicción donde desarrollé mis funciones. Y de esa experiencia enriquecedora aprendí que existen componentes bases para construir un diseño curricular es:

  • Un buen diseño curricular inicia con la identificación clara de los objetivos de aprendizaje. 
  • Los docentes pueden desarrollar una secuencia estructurada de recursos para lograr dichos objetivos. 
  • Un diseño curricular efectivo ofrece directrices para la selección y organización adecuada de los recursos educativos.
  • Establece un marco sólido para la planificación de las clases, lo cual es fundamental para la evaluación del aprendizaje. 
  • Todo esto debe fundamentarse en una teoría educativa robusta y en evidencia investigativa.

RAZGOS BÁSICOS QUE CNFIGURAN UN DISEÑO:


EL PASO A PASO PARA CONSTRUIR UN DISEÑO CURRICULAR.

Primero hay que identificar los objetivos de aprendizaje: el primer paso al diseñar un programa de estudios para una materia específica es determinar los objetivos de aprendizaje.
Luego se debe seleccionar qué métodos y materiales didácticos aplicar: tras definir los objetivos, se seleccionan los métodos y materiales didácticos más adecuados para lograrlos.
A posteriori, organizar y secuenciar el currículo: el paso final es estructurar y ordenar el currículo según los objetivos y métodos escogidos.
Una vez completado el diseño, es necesario que los docentes lo revisen para determinar si requiere ajustes. Por último, implementarlo. El paso subsiguiente es emplear el currículo diseñado para planificar y estructurar las distintas lecciones o unidades del curso. El diseño curricular | Artículos | Scala Learning


Toda jurisdicción gubernamental prevé implementar una serie de pasos que permiten la adecuación del diseño a un medio escolar concreto mediante tres niveles de concreción curricular.


El primer nivel son los aspectos normativos de aplicación que ejecuta la jurisdicción y sus direcciones de nivel: Una vez normado mediante decreto, acuerdo o resolución ministerial, el diseño es acompañado de una batería de recomendaciones mediante circulares que llegan a cada institución siguiendo el grado previsto a aplicación según el nivel que corresponda. A partir de ahí, cada comunidad educativa unifica los criterios básicos, acordando pautas y tiempos para implementar, según los recursos a su alcance.


El segundo nivel es adecuar a la realidad de cada comunidad educativa: El currículo de cada comunidad posee un carácter abierto que posibilita su contextualización por parte de las instituciones mediante lo que podríamos llamar concreción curricular, que se recoge en el proyecto educativo de cada escuela. Es decir, en este nivel se marca el qué, cómo y cuándo del proceso de enseñanza-aprendizaje adaptado a las características del medio y del estudiantado al que se dirigen.


El tercer nivel de concreción es en el aula. A partir de las decisiones tomadas en la institución, el profesorado desarrolla lo que se denomina programación de aula, la cual adapta los planteamientos de la concreción curricular del proyecto educativo a las características de un aula específica y a las necesidades de su alumnado en concreto.

En resumen, estos niveles permiten adecuar los aspectos establecidos a nivel nacional hasta llegar al nivel local, lo cual mantiene los mínimos para todo el país consiguiendo una educación cuya base es igual para todos, pero adaptada a los contextos concretos de cada jurisdicción, institución y aula.

Conocer los niveles de concreción curricular es de gran importancia en la labor docente, como también lo es la formación permanente que permitirá realizar una buena función como docentes y poseer conocimientos necesarios para realizar la concreción que le corresponde (la programación de aula y aquellos aspectos educativos que le sean encomendados por sus funciones en relación a concreción del currículo).

En futuras publicaciones, profundizaremos en otros aspectos de la organización escolar, como los regímenes académicos.


DG-EHVLI.

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